El Ministro de Economía y Competitividad analizó la situación económica nacional e internacional en el Curso de Verano de la APIE
Aunque, tal y como anunció, su intervención se centró en al análisis de la economía internacional, Luis de Guindos no pudo ni quiso evitar tratar la situación de la economía española durante su intervención en el Curso de Verano organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander. Como tampoco quiso evitar las preguntas sobre su candidatura a la presidencia del Eurogrupo, sobre la que se mostró francamente optimista. A su juicio, del mismo modo en que antes se pensaba para el cargo a políticos procedentes de países calificados con la triple A, ahora sería “más interesante» elegir a alguien de un país que haya estado al borde del colapso, y que haya sabido salir de la crisis y recuperar el crecimiento.
Fue precisamente este repaso a lo logrado lo que centró parte de su intervención. El mensaje fue claro: aunque se ha conseguido mucho, queda también mucho por hacer, y cualquier cambio de rumbo podría no ya desacelerar la recuperación, sino hacernos volver a la casilla de salida del año 2011. “Y es algo que la sociedad española tiene que entender: no caben caminos intermedios. Nuestra salida depende de conseguir esos objetivos. Y para eso no hay que revertir las reformas que han tenido efecto”.

Luis de Guindos, Ministro de Economía y Competitividad, a su llegada al Curso de Verano organizado por la APIE en la UIMP.
Las cifras de crecimiento, “entre el 3,5 y el 4%en este semestre”, la recuperación de la demanda doméstica, las nuevas aportaciones positivas del sector de la construcción, fueron algunos de los puntos fuertes de esa recuperación señalados por el Ministro de Economía y Competitividad. Tras la obligada referencia a la alta tasa de paro que aún afecta a España, matizó que “estamos creciendo por encima de nuestro potencial y creando empleo a un ritmo notable, del cual más del 60 por ciento son contratos indefinidos”. A su juicio, aunque “aún queda mucho por hacer”, el así se encuentra hoy en una situación “donde puede crecer en los próximos cuatro o cinco años a un ritmo aproximado del dos por ciento, reducir significativamente la tasa de paro y reducir los desequilibrios macroeconómicos. Es una situación en la que hace tiempo que no estaba”.
Apoyo a la candidatura
Así las cosas, no es de extrañar que respondiera a las preguntas sobre su candidatura a la presidencia del Eurogrupo con la convicción del que tiene muchas oportunidades. Restó importancia a las recientes objeciones del PSOE, mostrándose “convencido de que apoya la presencia de españoles en las instituciones comunitarias lo cual, obviamente, les agradezco. Yo creo que saben que es importante tener un español en la presidencia, y estoy convencido de que apoyan la candidatura española”.
Mas allá de su candidatura personal, De Guindos aclaró que la presidencia es buena para los intereses españoles, ya que “España está infrarepresentada en las instituciones, cuando ahora mismo es un ejemplo dentro de la zona euro. Igual que Portugal e Irlanda, que tuvieron serios problemas y ha sido capaces de darles la vuelta a una situación complicadísima”.
Una recuperación mundial «mediocre»
Sobre el contexto internacional, el Ministro de Economía declaró que el crecimiento económico mundial es “mediocre”, y la recuperación mundial “suave y tenue”, con varios factores que pueden obstaculizarlo, como la subida de tipos anunciada desde hace tiempo por la Reserva Federal de Estados Unidos: “llevan mucho tiempo diciéndolo y cuando por fin lo hagan puede producir volatilidad en los mercados de capitales. Por otro lado, Estados Unidos parece que va crecer menos que el año pasado, pero en Europa las noticias son mejores”.

Luis de Guindos, Ministro de Economía y Competitividad, durante su intervención en el Curso de Verano organizado por la APIE en la UIMP.
La piedra de toque europea sigue siendo Grecia, y De Guindos habló de la reunión del Eurogrupo prevista para dentro de unos días donde se intentará un nuevo acercamiento. “Nuestro objetivo es llegar a un acuerdo con Grecia, porque creemos que es fundamental mantenerla en el euro”. El problema, declaró, no radica en la deuda, ya que sus costes financieros en los próximos años “van a ser de los más bajos de la zona europea”, sino en que el gobierno griego se comprometa a asumir unos compromisos que le permitan crecer y generar empleo. “Necesita una Agencia Tributaria que funcione, hacer frente a modificaciones en el ámbito de las prejubilaciones, un plan de privatizaciones, actuar sobre los oligopolios y monopolios que existen en su economía… Pero no porque se lo impongamos los países acreedores, sino porque esas reglas, además, le vienen bien a la propia economía griega”.
Bankia, intervenida y despolitizada
Preguntado por el futuro de Bankia, respondió que la entidad va a vivir una recuperación paralela a la de la economía española, que le permita recuperar valor cuando llegue el momento de venderla. “Estoy convencido de que es un activo que va a valer muchísimo”.
Tanto en este caso como en el de BMN, consideró que los más de dos años que quedan de plazo antes de hacer efectiva la venta son”tiempo más que suficiente para conseguir un buen precio por las acciones de los mismos”. Y descartó la posibilidad de convertir Bankia en el pilar de nacimiento de un banco público, haciendo hincapié en que su recuperación se ha producido en un entorno plenamente despolitizado. “Si habido un ministro que no haya llamado nunca a las entidades intervenidas, he sido yo. Sus presidentes me llaman de vez en cuando para contarme los resultados, pero jamás les he dado ni una sola instrucción. ¿Cuándo han estado más despolitizadas unas instituciones? Yo creo que ese es el camino, y quien no siga ese camino, sin duda se equivoca”.
ENLACES DIRECTOS
VER GALERÍA FOTOGRÁFICA