El representante de Ciudadanos habló en el Colegio de Economistas de Madrid de la necesidad de reforzar la lucha contra el fraude fiscal y de la intención de su partido de implantar el contrato único
“Las políticas del PP y el PSOE Nos han dejado una nueva clase social: el precariado”. Así de contundente se mostró el representante de Ciudadanos al comienzo de su intervención en los encuentros electorales organizados por el Colegio de Economistas de Madrid, el Consejo General de Economistas y la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE), con la colaboración del Instituto de Estudios Económicos.
Al igual que hizo Cristóbal Montoro en el encuentro anterior, Francisco de la Torre explicó las medidas económicas que tomará su partido en el caso de ganar las elecciones y aunque algunas de las mismas se acercaban a las definidas por el Partido Popular, descartó los pactos postelectorales y se centró en apoyos puntuales para garantizar la gobernabilidad. Aunque coincidió en la necesidad de una rebaja fiscal, puntualizó que la anunciada por el Gobierno es en realidad “la reversión de la mayor subida de impuestos de la historia de España que, como es lógico, ha empezado a dar marcha atrás con el periodo electoral”.
Una rebaja fiscal que se autofinancia
La propuesta de Ciudadanos se centra en una rebaja media de IRPF de un 3%, cuyo coste estimó de la Torre en 2.100 millones de euros. Precisó, sin embargo, que “parte de esta rebaja se autofinancia, porque si los trabajadores tienen un mayor salario real, es evidente que querrán trabajar más. Es previsible que el mercado de trabajo se anime, y aumente tanto el número de horas trabajadas como su precio”. Disponer de más dinero en efectivo incentivará, además, el consumo.
Su otra medida, ya anunciada en otros eventos, es el Complemento Salarial Garantizado, una medida que “ya funciona con éxito en países como Gran Bretaña, Italia o Estados Unidos”, y que supondría un coste estático de 7.800 millones, lo que, unido a sus cálculos sobre el IRPF, establecen el coste estático de su reforma fiscal en 9.900 millones de euros.
De la Torre habló también de la necesidad de aumentar la recaudación fiscal mediante la reforma de determinadas tasas, como el Impuesto de Sociedades, al que definió como “un desastre lleno de agujeros y trampas. Cuando se eliminen, se debería poder recaudar 25.000 millones de euros”, y dorando de mayores recursos a la Agencia Tributaria, cuyo número de efectivos no cesó de reducirse en la última legislatura de Zapatero y en la presente de Rajoy: “Tenemos la agencia tributaria más pequeña de Europa en cuanto a medios. Y lo curioso es que invertir en ella se autofinancia, porque el incremento de personal supone más recaudación. No entendemos por qué se reducen los efecivos precisamente en tiempos de crisis”.
Contrato único y penalización a los despidos
En el terreno laboral, ratificó los planes de Ciudadanos de implantar el contrato único como la mejor manera de “acabar con la jungla de 45 fórmulas distintas de contratación”, y anunció la medida de bonificar a las empresas con menor número de despidos, y de incrementar la cotización a la Seguridad Social “a aquellas que estén constantemente despidiendo”. Recordó asimismo la creación del cheque de para los parados de larga duración, para que ellos mismos busquen la formación adecuada que les permita encontrar trabajo.
De la Torre también habló de las políticas de simplificación de la red de gobiernos públicos, con medidas como la eliminación de las diputaciones, que consideran innecesarias y cuyas atribuciones serían trasladadas a ayuntamientos y autonomías: “En España pasan cosas típicas de Corea del Norte, como que el puesto de presidente de una diputación se herede de padres a hijos”. En este campo, apostó también por un sólo fondo de financiación autonómica para los campos de sanidad y educación, que asegure que el presupuesto destinado a estas partidas sólo se gaste en ellas, y que evite que las comunidades decidan recortes por su cuenta en esos campos.
En el terreno de las pensiones, apostó por un sistema público donde los planes privados sean “complementarios, no alternativos”, y recalcó la necesidad de aumentar el empleo para garantizar la viabilidad financiera del sistema. Igualmente, consideró que es un tema que debería dejarse fuera de la contienda electoral, ya que “es un error que los partidos se aticen mutuamente por el tema de las pensiones”, e insistió en la necesidad recuperar el espíritu del Pacto de Toledo.