El sector cervecero presenta, en un acto organizado con la Asociación de Periodistas de Información Económica, las cifras de un sector en crecimiento cuyo volumen de negocio supone un 1,4% del PIB
Fue una presentación un poco distinta de las que son habituales en la Asociación de Periodistas de Información Económica. Pero la Asociación Cerveceros de España, presidida por Jacobo Olalla Marañón, quiso ofrecer los datos del sector en un almuerzo de prensa donde las cifras se juntaron con las curiosidades sobre la historia de la bebida y sus hábitos de consumo en España. Y con cerveza en abundancia, para celebrarlo.
Las cifras del informe pusieron de relieve el peso que este producto tiene dentro de la economía española: su valor de mercado supera los 15.000 millones de euros y supone un 1,4% del PIB. En 2015, experimentó un crecimiento del 3,1% en ventas, el mayor desde 2006, antes del inicio de la crisis económica. Los motivos de este incremento, según la Asociación se deben no sólo a la recuperación, sino al récord del turismo, el clima y la estabilidad fiscal. Además de las ventas, también aumentó la producción: un 4% más, lo que mantiene a España como cuarto país en la producción de cerveza dentro de la Unión Europea y en el segundo donde el sector cervecero genera más empleo, sólo por debajo de Alemania: más de 344.000 puestos de trabajo directos e indirectos, según calcula el informe, el 90% de ellos en el sector hostelero, para el que esta bebida puede suponer entre un 25 y un 40% de su facturación.
Reyes de la cerveza sin alcohol
El universo de la cerveza ha evolucionado en nuestro país mucho más allá de la típica caña; han evolucionado las maneras de servirla, de degustarla y de conocerla. Y también han evolucionado las opciones a la hora de tomarla: light, de sabores, sin gluten… y sin alcohol, una variedad que en España constituye un auténtico fenómeno: el 14% de la cerveza que consumimos es de esta variedad, el mayor procentaje de toda la UE. También están teniendo una importancia creciente las pequeñas industrias cerveceras locales que, repartidas por toda la geografía española, están haciéndose con una parte significativa del mercado: el informe cuenta 409 centros de producción inscritos en el Registro General Sanitario.
En cuanto a los lugares para tomarla, seguimos prefiriendo hacerlo fuera de casa: bares, restaurantes, terrazas, etc, se llevan un 64% del consumo nacional, lo cual supone un impulso para estos establecimientos por lo que el informe denomina “el binomio cerveza-tapa”, ya que el 84% de los españoles suele tomar la cerveza acompañada de algo de comer.
En cuanto a las exportaciones, en 2015 alcanzaron los 2,3 millones de hectolitros, siendo los principales destinos Guinea Ecuatorial, Reino Unido, Portugal y China. Este último país recibió 26.142 miles de litros, una tendencia creciente que Jacobo Olalla explicó por el auge de la economía china en los últimos años, y por la calidad mejorable de sus cervezas, que abona el terreno para las marcas de otros países. “Cuando un consumidor chino busca algo más, bebe cerveza extranjera, y la española está entre ellas”, declaró.